
¿De quién son mis ojos?
María Martínez López | martes 2 de diciembre de 2008 | Sección: Familia, Vida
El supuesto “derecho al hijo”, los hijos de laboratorio y los huérfanos biológicos.
El supuesto “derecho al hijo”, los hijos de laboratorio y los huérfanos biológicos.
Si, contra toda evidencia científica, el embrión se considera “un montón de células”, se están minando las bases mismas de la civilización.
No es justo que quienes ofrecieron su vida por la Patria sigan siendo utilizados para alimentar la ambición de venganza de algunos.
Sobrevivir intelectualmente en el siglo XXI se ha convertido en todo un desafío. Para afrontarlo, el autor, uno de los escritores españoles más leídos, ofrece un consejo: leer la obra del padre Castellani.
Con la eutanasia, la vida y el final de ésta quedan a merced de umbrales de mayor o menor dolor, criterios financieros, criterios volitivos o anímicos y otros… Terceros, uno mismo o el médico definen qué vida merece ser vivida y cuál no.
Una verdadera paz sólo es posible por el perdón… El perdón parece signo de debilidad y derrotismo, mientras que la violencia parece vencedora. En realidad, sucede lo contrario.
Según este informe, preparado por AIS, en más de 60 países se registran – hasta el día de hoy – ataques a la libertad religiosa.
¿Por qué hemos vuelto a ver a algunos pequeños seres humanos como menos dignos, como material de experimentación?
Los monumentos a servidores públicos no son erigidos para comodidad de nadie, ni tampoco para exaltar a quien representan, salvo en un punto: la consagración total y desinteresada al servicio público… sólo por amor a la patria.
En su libro “El lenguaje de Dios”, Francis Collins, el descubridor del genoma humano, cuenta su conversión. Él fue otra ‘víctima’ de C. S. Lewis.