Con buena onda no alcanza
Sergio Urzúa | viernes 18 de marzo de 2022
Habría que ser muy bruto para no desearle la mejor de las suertes al Presidente Boric. Como él reconoció en su discurso del viernes, se vienen “tiempos desafiantes y tremendamente complejos”. En lo económico y social, no habrá luna de miel. Ya voló la corbata, ahora toca arremangarse las mangas. Lo bueno es que cada desafío representa una oportunidad de logro. Tres ejemplos. La inflación, ese nefasto impuesto que golpea más fuerte a los más pobres, se ha dejado caer nuevamente en Chile. En febrero llegó a 7,8% (en 12 meses) y la mitad de los consultados en la Encuesta de Expectativas del Central la ubica en 5,8%, a diciembre de 2022 (un 43,5% por sobre 6%). ¿Sorprende? No. Con la expansión de la base monetaria local (más del 60% en dos años), el mayor gasto público, los retiros, los problemas en las cadenas de distribución mundiales y, más encima, ahora, el costo del petróleo en niveles récord, los precios tenían que volar. Pronto el Central sorprenderá con otro potente aumento en la Tasa de Política Monetaria. Si el Gobierno da una mano con ...