Cuando pienso en la identidad de los cristianos, podría pensar en gente muy buena, muy  puritana, que no le hacen mal a nadie y que nacieron con las manos juntas, rezando todo el día. Pero pensar en personas comunes y corrientes o peor aún, que son tan pecadoras como tú o como yo y que cambiaron de vida tan drásticamente y para bien, ¡Parece imposible!

El mundanismo de hoy te indica que para ser feliz tienes que “tener”  y te llena la cabeza con frivolidades, con lujos, con el poder tener cosas que quizás no necesitas y que jamás vas a poder pagar. El truco es no dejarte pensar al llenarte de excesos de violencia, placeres, dejándote dominar por tus instintos y/o pulsiones, etc. Un ruido feroz. Incluso escribir esta columna no ha estado exento de dificultades y muchas distracciones.

Cuando empiezas a pensar para qué venimos a este mundo y cómo termina este mundo, es cuando te cuestionas tu vida y si rezas, permites que Dios Te hable y existe una alta probabilidad de que te conviertas,  si es que te atreves a reflexionar al respecto.

En este primer capítulo de trece historias llamadas “Te puede pasar a ti”, Juan Manuel Cotelo, el mismo director de La Última Cima, nos muestra la historia de un pandillero, Juango Callejas, alguien por quien nadie daría un peso, en medio de un ambiente brutalmente agresivo. Me recuerda ciertos sectores de Santiago en que ni un Carabinero se atreve a entrar porque la violencia es ama y señora. Lugares en los cuales no hay libertad, no hay justicia, solo la ley del más fuerte.

Entonces, en ese escenario ¿Es posible que una conversión al catolicismo se produzca? Y la respuesta es categórica: Sí. Y no se trata, por lo menos en esta historia, de una aparición mística de la Virgen María o del Sagrado Corazón, sino de un encuentro cercano con la muerte.

Acabo de notar que esta es mi tercera columna en que trato este tema. Me imagino que no es coincidencia. Y es que la muerte es algo que tratamos de evitar, que le tememos, pero que cuando la abordamos en su verdadera profundidad, nos damos cuenta que es solamente la puerta para otra vida maravillosa.

Volviendo a la historia, lo impactante es ver cómo él, “Juango”, que por lo que cuenta parecía imposible pudiese abrazar la fe, no sólo ha vuelto su mirada a Cristo, sino que es un gran sacerdote que hoy es capaz de compartir con humildad y elocuencia su propio testimonio.

Siempre me ha llamado la atención de los hombres de Dios, lo felices que son y la paz que transmiten pese a los enormes problemas que sufren igual que uno. Reconozco que me da un poco de envidia, quizás bastante.

Es el mismo protagonista de esta historia quien se encarga de darnos la receta. No basta con tener un encuentro personal con Dios, ese es sólo el punto de partida. Sino de comenzar una nueva vida unidos firmemente a esta vid que nos alimenta.

Tutearse con Dios no significa decir ya tengo todo resuelto y como dicen los cuentos: “Vivieron felices para siempre”. Aquí uno con su libertad tiene que pasar de ser espectador de su vida a protagonista. Comienza, tal como dice Cotelo, “Un camino llena de curvas peligrosas que durará toda la vida y que se llama conversión”. Una senda por la cual nos equivocaremos muchas veces, pero donde lo importante es siempre volver a recomenzar con alegría.

El Director de esta cinta lo dice de una manera genial, mientras le pasa una escobilla a la casa-rodante o caravana, como dice él; en la que viaja contando estas historias. “Primero hay que dejarlo todo limpio, limpio, limpio”. Aquí se hace una aproximación catequética a la confesión. Típica frase “Yo me confieso directamente con Dios, no creo en los curas ni en la Iglesia. ¿Cómo voy a confesarme con un hombre tan pecador o más que yo?”. Todas esas preguntas quedan resueltas con este documental.

Finalmente, rescato una parte riquísima de este documental. Al terminar el testimonio, Cotelo sube a su casa-rodante a 6 adolescentes entre 16 y 19 años. Una chica embarazada, uno que se declara ateo, otro que dice ser experto en sexo, otro que no cree en los milagros, una chica musulmana y otro joven que dice ir a misa y confesarse. A este grupo de lo más variado, les muestra el testimonio de Juango y luego comienza entre ellos un interesantísimo debate sobre fe, sexualidad, lo que dice la Iglesia, la confesión, la opinión del resto frente a la opción de optar por el catolicismo, por qué Dios permite el mal del mundo, en fin… temas que uno pensaría que a los jóvenes no le interesan. Pero sí.

Una historia optimista, juvenil y actual. Un testimonio inspirador que nos invita a los que creemos en Dios a vivir la fe en su totalidad y a los que no, a preguntarse ¿Crees que esto te pueda pasar a ti?

Te puede pasar a ti

Capítulo 1: “Quiero cambiar mi vida pero no me atrevo”

Calificación:    No recomendada para menores de 13 años

Idioma:          Castellano

Sistema:        DVD formato NTSC – Zona 4

Contenido “Quiero cambiar de vida pero no me atrevo”:
1. El salto de la fe
2. Dios y la juventud.
3. Confesión: manual para principiantes.
4. ¿Existe el demonio?
5. Experiencias cercanas a la muerte.
6. Noviazgo y sexo.

Disponible en www.peliculascatolicas.cl.

Ver sinopsis