No son las tierras, son los fierros

Gonzalo Rojas S. | Sección: Historia, Política

El robo de madera ha sido reivindicado por el líder de la CAM, Llaitul. Ha dicho que necesitan generar recursos para “tener los fierros, y para tener los tiros, y para tener los implementos necesarios para defender a las comunidades y los procesos que se llevan adelante.”

En castellano -lengua en la que Llaitul habla pero que algunos parecen no entender- la CAM necesita dinero para comprar armas y así poder seguir atentando contra las propiedades, instituciones y personas que esa guerrilla considera como sus enemigos.

Y como en tantas otras ocasiones, aparece un comunista para justificar esos delitos que, además, son anuncio de guerra abierta.

Cuando yo entiendo lo que está diciendo Héctor Llaitul, lo entiendo como que a Chile le falta asumir que le robó la tierra al pueblo mapuche y a los pueblos originarios y que se la ha venido robando durante mucho tiempo”, sostuvo Daniel Jadue, el inefable comunista que en algunos momentos oficia de alcalde de Recoleta. 

Hubo una época, por allá por los años 1956 a 1962, en que el PC hablaba de la vía pacífica de acceso al poder. Después, su secretario general, Luis Corvalán, modificó el concepto y comenzaron a hablar de la vía no armada, porque al ver cómo habían triunfado los barbudos cubanos -mediante los fierros y los tiros, diría Llaitul- al PC le pareció que negar la violencia era poco rentable, cuando sus compañeros de ruta, el PS, parecían inclinarse sin pudor por esa fórmula, aprovechándose del simbolismo mediático de la Revolución Cubana.

Corvalán explicó entonces que la vía no armada implicaba el uso de ciertas formas de violencia en huelgas, tomas y manifestaciones varias. Todo un eufemismo. 

Después en los años 80, el PC desarrollaría las tesis de la insurrección popular y formaría el FMR. Los fusiles internados por Carrizal Bajo serían la prueba irrefutable de su opción por la vía armada.

Hoy Jadue continúa en esa línea; hoy Jadue valida sin matices que la CAM compre fierros, tiros e implementos… 

La discusión sobre el estatuto de las tierras le sirve a Jadue para ocultar algo muy grave: es la validación de los instrumentos con que la CAM podría seguir extendiendo su reguero de violencia y muerte.