Una situación más que inquietante

Max Silva A. | Sección: Política

Tan rápidos han sido los sucesos de Estados Unidos en las últimas semanas, que es posible que parte de la información expuesta aquí resulte hoy añeja o incluso irrelevante, tal como ha sido la tónica de este auténtico thriller de la vida real. Todo lo cual hace surgir la incógnita de qué podría pasar en este país en el futuro inmediato. Veamos algunos hechos.

Como se sabe, el 06 de enero, día de la certificación de los colegios electorales en Washington DC, Trump dio un discurso ante cerca de un millón de seguidores. Más tarde, mientras se comenzaban a impugnar los resultados de algunos estados, se produjo el conocido e impactante asalto al Capitolio, produciéndose la evacuación del mismo. Sin embargo, superada la emergencia, se continuó con este proceso, las restantes impugnaciones no se realizaron y finalmente, se proclamó a Biden como presidente electo.

Inmediatamente, se produjo una reacción en masa del partido demócrata, quien exigió la salida de Trump, acusándolo de haber incitado el asalto al Capitolio. Sin embargo, además de que nada en su discurso puede interpretarse en tal sentido, posteriores investigaciones han dado muestra de la escasa seguridad del edificio, de la colaboración de guardias para permitir el ingreso de los manifestantes, y el FBI ha confirmado que varios de ellos –algunos ya detenidos–, no son partidarios de Trump.

De todas formas, se intentó primero inhabilitarlo a través de la Enmienda 25 de la Constitución, acudiendo al vicepresidente –quien se negó a hacerlo– y luego, en tiempo récord, la Cámara de Representantes votó un Impeachment, que debe ser visto por el Senado. De prosperar, impediría que Trump pueda postularse en 2024. 

Por otro lado, el aún presidente en ejercicio, fue censurado de las principales redes sociales, suerte que también corrieron muchos de sus colaboradores y millones de simpatizantes. Ello ha producido una gigantesca migración a otras redes, así como una drástica caída en la bolsa de los censuradores. Además, ha hecho surgir la pregunta sobre el real poder de estos medios de comunicación dentro de una sociedad democrática.

Al mismo tiempo, se está produciendo una auténtica caza de brujas hacia todos aquellos que han colaborado con el gobierno saliente. Y por su parte, Trump ha desclasificado muchísimos documentos –que llevará semanas o meses analizar–, que comprometen gravemente al partido demócrata, incluido Biden. Dado lo anterior, algunos republicanos han amenazado con presentar un impeachment contra este último el jueves.

Con motivo del asalto al Capitolio, se ha resguardado la seguridad de Washington DC, que entre la guardia nacional y otros agentes, alcanza casi 30.000 efectivos. El centro de la ciudad ha sido vallado, al punto que parece una prisión. Y se planea una ceremonia de toma de posesión sin público, salvo los invitados de honor, a la cual Trump no asistirá.

Al mismo tiempo, se esperan protestas en las principales ciudades del país, y los demócratas a su vez, temen un ataque interno de los propios militares que los custodian. Finalmente, y como si fuera poco, el lunes, en una entrevista realizada en NBC al jefe de la guardia nacional de DC, este declaró que se espera una “transición pacífica al poder militar” (“a peaceful transition to militar power”), lo que ha generado todo tipo de especulaciones.

En consecuencia, dado todo lo relatado, hay motivos más que inquietantes para preguntarse qué podría pasar, lo cual tendrá, evidentemente, repercusiones mundiales.

Nota: Este artículo fue publicado originalmente por diario El Sur de Concepción. El autor es Doctor en Derecho y profesor de filosofía del derecho en la Universidad San Sebastián.