La PSU y los aprendizajes escolares

Germán Gómez Veas | Sección: Educación, Política, Sociedad

#06-foto-1La PSU tal como la conocemos, tiene sus días contados. Así al menos lo han afirmado sus administradores. Pero antes de lapidar o transmutar a la mensajera, conviene examinar lo que en esta ocasión ella nos comunica respecto de los aprendizajes escolares. ¿Nos informó algo acerca de cuánto, qué, o cómo están aprendiendo los alumnos que egresan del sistema escolar?

De los puntajes de las pruebas obligatorias de la PSU, se establece que los alumnos de colegios particulares que obtuvieron menos de 450 puntos fue un 6,8%, y los que alcanzaron menos de 500 un 6,6%; la situación en el sector de los establecimientos subvencionados fue de un 29,7% y un 19,8% respectivamente; en tanto que los alumnos de establecimientos municipales, un impresionante 43,5% no alcanzó 450 puntos y un 20,6% obtuvo más de 450, pero menos de 500 puntos. En consecuencia, las cifras nos indican que en esta versión de la PSU fracasaron en el objetivo de obtener más de 500 puntos un 13,4% de los alumnos que asistieron a colegios privados; un 49,5% de los que confiaron en establecimientos subvencionados; y un 64,1% de jóvenes que recibieron los servicios educativos en establecimientos municipales.

Una mirada complaciente a estos pésimos resultados en el sector municipal, podría sugerir la especulación de que todo se explica por lo segmentado que está nuestro sistema escolar. Esa inferencia es bastante persuasiva, porque sí es cierto que en Chile tenemos una amplia y profunda segregación. Pero parece insuficiente explicar, a partir de esa situación, el fracaso escolar que se advierte en la educación municipal. Para ser justos con el análisis, debemos atenernos a la gestión escolar, considerando los logros en los aprendizajes. Y en este contexto, es necesario preguntarse al menos por tres factores de lo que pasa en las aulas: si los alumnos de los centros educativos municipales están recibiendo los contenidos necesarios; si perciben como un gran desafío lo que pasa en las aulas; y si está siendo eficaz la forma con que se enseña en este sector escolar.

Lo primero que se desprende de los resultados, es que la mayoría de los jóvenes que asistió a establecimientos públicos no aprendió los contenidos que el curriculum establece como mínimo para egresar de enseñanza media y acceder a la educación superior. Lo segundo es que los liceos municipales no están siendo un desafío para sus alumnos, pues ello supone contar con un enfoque organizacional centrado precisamente en los aprendizajes, lo que implica establecer objetivos pedagógicos complejos y a la vez diversos, para todos los niveles educativos, y para cada asignatura, sin excusas. Y en tercer lugar, los hechos evidencian que en la mayoría de los establecimientos públicos tampoco se están aplicando las metodologías activas que potencien competencias reflexivas, centradas en las destrezas de lectura comprensiva.

La PSU nos comunica con claridad, que hay que realizar cambios profundos en lo que los profesores hacen en el aula, en los tiempos que tienen para preparar sus clases, e innovar en capacitaciones que mejoren la eficacia pedagógica.