Medios de comunicación social y espejos

P. Fernando Pascual | Sección: Sociedad

Los espejos reflejan lo que hay fuera. No se reflejan a sí mismos.

Los medios de comunicación social existen, teóricamente, para contar cómo va el mundo. Pero en no pocas ocasiones hablan, y mucho, de sí mismos. 

¿Es correcto esto? Pensemos nuevamente en el espejo: hay veces que lo observamos no por lo que refleja, sino en sí mismo. ¿Está limpio o sucio? ¿Deforma las imágenes o las respeta como son? ¿Es posible replicarlo y construir otros espejos como éste?

Algo parecido ocurre cuando hay medios de comunicación que se convierten en el centro de nuestras observaciones. ¿Están “limpios o sucios”? ¿Son honestos o sirven a grupos de poder para imponer ideologías y para defender los intereses de empresarios, banqueros o políticos? ¿Podemos imitarlos a la hora de crear nuevos medios informativos?

Si, además, los medios hablan mucho de sí mismos significa que hay algo distorsionado en el mundo de la noticia. La abundancia de críticas de unos medios contra otros, o la exaltación recíproca, o la reduplicación de datos que pasan de un medio a otro, son señales de una extraña paradoja: el informador está más preocupado de sí mismo que de lo que debe informar.

Al pensar sobre estas líneas, una voz interior parece susurrar: ¿no incurres también tú en el defecto que criticas? ¿No están poniendo como centro de atención al medio en vez de lo mediado, al informante en vez de la información?

Otra voz interior responde: bueno, cuando un espejo está sucio tengo que mirar el espejo, no lo que refleja. Sólo después de limpiarlo podré usarlo para su finalidad natural, para ayudarme a ver más y a ver mejor.

Si tantas veces hablamos de los medios, quizá es porque algunos necesitan una limpieza profunda. El jabón será la honestidad. El estropajo, la exigencia de los amantes dela verdad. El resultado a conseguir: un instrumento mejor preparado para su cometido. Así será posible que hombres y mujeres tengamos acceso a datos objetivos y a sanos criterios de juicio, con lo que estaremos mejor preparados para conocer más a fondo el mundo en el que vivimos.

 

 

Nota: Este artículo fue publicado originalmente por Análisis Digital, www.analisidigital.com.