Y ahora el aborto

Jorge Reyes Zapata | Sección: Familia, Política, Vida

Con gran preocupación y profunda decepción conocimos de la aprobación, en la Comisión de Salud del Senado, de tres proyectos de ley de aborto. Uno presentado por el senador Escalona, otro presentado por el senador Girardi y el ex senador Ominami, y un último presentado por el senador Rossi y la ex senadora (hoy ministra) señora Matthei. La sala del senado, conociéndolos, deberá decidir de refundirlos o no.

En términos simples los proyectos, por cierto equivocados, aprueban el aborto por causal, el mal llamado aborto terapéutico y figuras que jamás han sido consideradas como aborto.

Decimos que existe preocupación y decepción, ya que este acto de aprobación en comisión se realizó sin escuchar al Ministro de Salud, quien siendo invitado a exponer la opinión del gobierno, sencillamente no llegó. En entrevista dada por el mismo señor ministro a la Revista del Sábado hace algunos meses atrás y preguntado por su opinión  sobre el aborto, éste prefirió omitirla. A nuestro juicio, tal silencio hoy resulta elocuente, ya que unido al acto inexcusado de ausencia a defender el Derecho a la Vida del que está por nacer, queda de manifiesto su parecer.

De un tiempo a esta parte Chile, y particularmente su gobierno, viene de tumbo en tumbo en materias tales como el Derecho a la Vida y el deber de brindar resguardo y protección a la Familia. Reconocemos que existe un discurso reiterativo de SE el Presidente de la República, que proclama tales valores como fundamentales de su decisión; sin embargo, ellos no se reflejan en su acción.

En lo relativo a la Vida, no existe acción alguna que manifieste su real compromiso, antes bien ha decidido por sí y ante sí que la Píldora del día Después no es abortiva y la reparte sin tapujos por doquier, contrariando abiertamente un fallo vigente y firme del Tribunal Constitucional, el que señaló exactamente lo contrario fundando su decisión en razones Constitucionales que hasta la fecha no han variado. Si a ello agregamos esta no asistencia  del Gobierno en la defensa de los no nacidos ante la comisión de salud, y que una de sus patrocinadoras es actualmente Ministra del mismo Gobierno, el cuadro de decepción queda irremediablemente cerrado.

En lo relativo a la familia el tema no es mejor. Las únicas iniciativas que han surgido del Gobierno son el bono de los 50 años de matrimonio, que es sólo para quienes los cumplan el año del Bicentenario y que por la prensa hemos constatado lo imposible de cobrar, y el famoso post natal. El resto no es mejor, pues son abiertamente acciones que debilitan la familia, como el proyecto de no discriminación re-redactado por el actual gobierno y el proyecto de AVP. A ello podemos agregar que el nuevo reglamento de subsidios habitacionales publicado este año en el DO  privilegia como postulante la madre soltera, con 30 puntos por sobre la familia constituida, claramente una política pública profundamente equivocada.

Ahora, con la aprobación en comisión del aborto, terminamos de ver cómo lo que no fue posible hacer en 20 años de Gobierno de la Concertación, se ha realizado en sólo dos del gobierno de Piñera nada de lo que la inmensa mayoría que voto por él hubiera esperado.