El diputado Iván Moreira contestó en duros términos la Columna del profesor Gonzalo Rojas publicada la semana pasada en Vivachile.org. Desgraciadamente, el diputado Moreira no autorizó al profesor Rojas para divulgar su correo, decisión que Vivachile.org respeta. El profesor Rojas le manifestó al diputado Moreira, eso sí, que daría a conocer por Vivachile.org su respuesta al correo del parlamentario.

Esta es la respuesta que se le dio.

Estimado Iván:

Te agradezco este correo y la sinceridad con la que me escribes.

Antes de entrar al fondo de tus argumentos y dada la publicidad de mi columna, te solicito permiso para publicar tu correo en VivaChile.org, así como para enviarlo a quienes me escribieron por la columna que comentas. Si prefieres no darme la autorización, al menos yo enviaré a esa gente y a la página mi contestación. Lo lógico sería que conocieran las dos versiones, ¿no?

Por otra parte, te adjunto al final unos pocos comentarios, de entre tantos recibidos, para que conozcas el tenor de la posición que sustentamos. No he colocado los nombres y he cortado las referencias personales cuando no venían al caso.

Ciertamente no comparto las líneas de tu argumentación.

En cuanto a la molestia que te suscita la dureza de nuestra disidencia, tendrás que acostumbrarte: no es la Concertación ahora tu principal rival, sino quienes coincidiendo contigo en visiones sobre aspectos históricos, te enfrentaremos en todos los planos de la inteligencia en materias fundamentales. Somos militantes de tu mismo partido y tenemos el mismo derecho que tú esgrimes a participar en la vida pública, desde nuestras tribunas, así como tú usas la tuya. No pretendas acallarnos, porque no lo lograrás. Nada se saca tampoco con que uses adjetivos que piensas podrían asustarnos. Ni somos la voz de Dios, ni tú eres la del demonio; nadie te ha calificado de pecador; simplemente queremos demostrarte racionalmente que has cometido un error grave, que la UDI esperaba más de ti y de los otros cuatro diputados, que si ha habido un reciente Congreso doctrinario que ha ratificado toda la inspiración cristiana que nos mueve, la de ustedes ha sido la primera gran claudicación en estas materias. El principio “en la duda abstente” debió regir tus actos. No lo hiciste: fallaste. Acepta ahora la confrontación directa: no te escudes en popularidades ni descalifiques sin entrar al fondo de la discusión. Ni estas son amenazas, ni es fundamentalista ni sectaria la posición que te intenta demostrar que estás equivocado al omitir un principio fundamental de la moral natural.

Por cierto que puedes ganar en diciembre: quién podría dudar de la adhesión con que contabas y quizás aún cuentas. Es importante que sepas, eso sí, que todas aquellas personas que ponen primero a la vida y después a las elecciones, no estarán contigo mientras no rectifiques. Ellos están en su derecho y tú en el tuyo. En eso consiste lo accidental de nuestra disputa. Lo esencial es mucho más importante: es la vida humana.

No te preocupes: ya había tomado la decisión de proponer a los jóvenes otro lugar de reunión. Serán ellos, si quieren seguir formándose, quienes determinen el lugar. La sede que usas y que todos los chilenos pagamos con nuestros impuestos, puedes seguir utilizándola sin que yo tenga derecho alguno a exigir nada de ella.

Te saluda con afecto, espera tu autorización para dar a conocer estos correos y tu pronta rectificación

Gonzalo Rojas Sánchez