Consumar el tiempo, que no es lo mismo que consumir el tiempo.

No tienes que preguntarle al tiempo, sino al dueño del tiempo.

El asunto es como has consumido tu tiempo, antes que el mismo sea haya consumado para ti.

Darle tiempo al tiempo, preguntarte, cuestionarte, acusarte, juzgarte, condenarte o perdonarte.

Ser un hombre bien HOMBRE, enamorarte con todo tu ser, amar con toda claridad, sin miedos, sin prejuicios, amar, por sobre todas las cosas de este mundo.

El verdadero amor traspasa el tiempo y la historia, que no es más que un recuento ordenado de los hechos del ser humano a través del tiempo. El amor trasciende toda la vida del ser humano, hasta la consumación del tiempo.

Sólo los que aprenden a amar pueden sentir la presencia de Dios y sus positivos efectos.

La consigna entonces es AMAR, sólo así podrás ser feliz, a pesar de todos los pesares, ama sin medida y siempre estarás alegre y no habrá nada ni nadie que pueda contigo.

Hedonismo, individualismo, materialismo, pragmatismo, relativismo, etc., etc., empequeñecen al hombre, lo ponen miope, lo hacen miserable, egoísta, avaro, mentiroso, interesado y lleno de soberbia.

Alguien dijo que el hombre que no aprende a reconocer a Dios es como un cuadrúpedo, que por pasársela comiendo y por andar en cuatro patas, se priva de mirar al Cielo y de conocer todo lo hermoso y magnífico que allí hay.

El hombre es un bípedo, y fue hecho así para que mirara al cielo y fuera feliz.

Antonia